jueves, 25 de febrero de 2010

Por una Universidad descentralizada y atenta a las demandas sociales.

A partir de lo sucedido con la Facultad de Medicina y el debate que se generó en torno a la descentralización universitaria, creemos que se ha abierto un espacio muy interesante para analizar el futuro de la educación terciaria desde un plano estratégico, a mediano y largo plazo.

En ese marco, es ineludible que aportemos nuestro enfoque, no solo como representantes nacionales integrantes del Parlamento Nacional, sino como actores políticos comprometidos desde siempre con el proceso de descentralización territorial.

En la entrevista que mantuvimos recientemente con el rector de la Universidad, Dr. Rodrigo Arocena, nos interiorizamos del proyecto académico que contempla a todo el país, con la conformación de sedes regionales solidas que incorporarán los nuevos conceptos de educación que se siguen en países referentes del mundo.

Nos alegró encontrarnos con una visión diferente a la de 20 o 30 años, y más cercano en el tiempo también, cuando el antagonismo capital versus interior se dilucidaba en eternas luchas sectoriales. Producto de esas confrontaciones, traducidas en multitudinarias movilizaciones desde el interior, los salteños conocimos conquistas como la de la Represa de Salto Grande y la de la propia sede de la Universidad, cuando la consigna era por la vieja "Universidad del Norte".

Lejos estamos de aquel 1957, cuando comenzaron los primeros cursos de Derecho en Salto, en la vieja casona del "Osimani y Llerena", como consecuencia de un efervescente reclamo popular.

A más de 50 años de los cursos universitarios en la región y en vísperas de un debate acerca del futuro de la enseñanza terciaria en esa zona del país, nos vemos en la necesidad de introducir algunos conceptos, sin los cuales sería imposible mejorar y avanzar hacia un destino más prospero.

No podemos concebir, de ningún modo, una enseñanza universitaria elitista. Como dato basta señalar que en la actualidad solo el 17% de los jóvenes que terminan el liceo concurren a la Universidad y de ese porcentaje apenas el 5% de los estudiantes pertenecen al primer quintil socioeconómico (20% de hogares con menores ingresos), es decir los hijos de los obreros.

Otro estudio, citado por el rector Arocena en la entrevista que mantuvimos, indica que los estudiantes que asisten la Regional Norte pertenecen a segmentos medio-bajos de la economía. Es decir jóvenes que provienen de familias de bajos ingresos, que tienen limitaciones al momento de afrontar una carrera universitaria.

Otro aspecto que resulta determinante al momento de pensar una "nueva Universidad", pasa por su vinculación con el medio. Nuestra concepción acerca de la educación superior pasa por un sentido de pertenencia hacia un ámbito donde, por un lado el Estado (es decir todos) contribuye fuertemente con recursos económicos para su funcionamiento y, por otro, debería existir una correspondencia plena de los servicios de extensión de la casa de estudios atendiendo las demandas sociales.

El rector Arocena anuncio la instalación de Mesas Consultivas para analizar estratégicamente las regionales de la Universidad en el Interior. Las mismas estarán conformadas por actores políticos y sociales relevantes en cada zona del país.

A partir de esos aportes se intentará elaborar un proyecto académico que responda lo más fielmente posible a las demandas del medio.

Estamos en sintonía con estas acciones y seremos firmes representantes de los postulados que hemos detallado en estas líneas. Ese es nuestro compromiso.

Y finalmente, esperamos que todo concluya con un proyecto moderno, verdaderamente descentralizado e integrador en el ámbito de la enseñanza pública superior.

Felipe Carballo

Representante Nacional